Heb 11:1 La fe Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve.
La fe es la realidad de aquello que esperamos, y la prueba segura y palpable de lo que no se ve, pero veraz!!!. Por la fe los grandes hombres y mujeres de la Biblia: Abraham, Sara, Noé, Moisés, Josué, Ester, Débora, Gedeón, David, Daniel, María, la mujer del flujo de sangre, la mujer del frasco de alabastro, los discípulos, y muchos otros, que no terminaría de escribir, fueron del agrado de Dios y hallados delante de sus ojos como hombres y mujeres valientes de gran FE, que marcaron la historia y fueron recompensados por Dios. Así como ellos, nosotros también somos probados por Dios en la FE, al punto de que cuando ya estamos a punto de alcanzar nuestro anhelo, nuestra petición está a punto de ser contestada, o el milagro y la bendición una realidad, todo parece dar un giro de de 180 grados y de repente puff….qué pasó que ahora no veo NADA….sí, suele suceder. En ocasiones, es necesario que DIOS nos demuestre a nosotros mismos, (porque ÉL no necesita confirmarse a sí mismo lo que conoce a la perfección y por ÉL fue determinado), que según la magnitud y lo grande de nuestra FE, así de grande será la obra que DIOS hará, y el milagro o la bendición con la que nos recompensará. DIOS sabe que nuestra FE en nuestra humanidad, puede debilitarse, pero se trata de que en medio de el momento en que comience a debilitarse, la podamos activar desatando por medio del poder de su Palabra aquello en lo que hemos creído y sabemos que aún cuando la montaña intente desviar nuestra convicción, VA A LLEGAR Y A SUCEDER. La FE aunque pueda debilitarse, NO la debemos perder, porque “sin FE es imposible agradar a DIOS”. A DIOS le agrada ver que confiamos y creemos que lo que ante nosotros es imposible, para el DIOS DE LO IMPOSIBLE, ES POSIBLE.
Si ante las cosas que vemos y escuchamos día a día con nuestros ojos físicos nos rendimos, no podremos ver el camino que Dios abre día a día en nuestras vidas. Las nuevas oportunidades, los nuevos retos, metas por alcanzar, los niveles por escalar, LA HISTORIA QUE ESCRIBIR. No es fácil cuando estamos en medio del mar y las olas se hacen fuertes y parecen ahogarnos, el no desesperarnos, pero ahí es cuando DIOS nos pide que activemos la FE y miremos con nuestros ojos espirituales, lo que está al otro lado de la montaña.
Por FE creemos en DIOS y en todo lo creado por ÉL, y con esa misma FE es que debemos creer que aquello que necesitamos, y tanto anhelamos, ÉL lo conoce, lo va a suplir y se va a cumplir. La FE es la confianza en aquello que ante nuestros ojos es abstracto e invisible pero que en el reino de los Cielos es visible, y se hará visible en la Tierra. Todo lo que nos pide nuestro amado Padre, es que podamos accionar en FE, porque la FE sin obras es muerta, pero cuando la llevamos al verbo activo de la acción le damos vida, y se hace visible el milagro, la obra, la petición por medio de lo que en FE hemos obrado. Dios te bendiga!!!